El deporte es un elemento universal, necesario para toda la sociedad sobre todo para que los jóvenes puedan desarrollar sus capacidades personales y a su vez crecer colectivamente como sociedad integrando cada una de estas conquistas. 

Es necesario legislar para cuidar los clubes de barrio, lugar donde los deportes se desarrollan, porque son lugares de encuentro que involucran a los ciudadanos con espacios de contención social, donde experimentan el compromiso, la confianza, el respeto y el compañerismo; valores que se proyectan luego a lo largo de una vida. 

Además de las disciplinas, el juego en equipo, es una parte importante de nuestras vidas, ya seamos espectadores o participantes. Porque el deporte no solo es actividad física, es también una fuente inagotable de conversación, de intercambio y trabajo en equipo. El deporte está muy vinculado a nuestra identidad y cultura en algún momento de nuestra vida.

Si vemos un poco más allá, podemos ver que el deporte colabora con una gran cantidad de valores, sobre todo en los juegos de niños, y se hace evidente que se ha desarrollado como medio de enseñanza de aptitudes necesarias para la vida. Cuando hay motivación, todo aprendizaje es mejor.